La cobertura de mamografía ofrece varios tipos en función de su propósito: mamografías de screening o cribado (las realizadas en mujeres sin síntomas. Normalmente se comienza a realizar a partir de los 40 años de edad. También se pueden hacer a pacientes con factores de riesgo), las mamografías diagnósticas (las realizadas para resolver una sospecha particular relacionada con una exploración de la mama).
La cobertura de mamografías es una de las pruebas de diagnóstico por imagen incluidas en los seguros de salud. Una mamografía es una imagen de la mama tomada con rayos X. Las aseguradoras pueden incluir además dentro de las pruebas diagnósticas la mamografía 3D o tomosíntesis (la mamografía 3D se combinan generalmente con una mamografía estándar) que facilita la detección precoz del cáncer de mama gracias a las imágenes tridimensionales que permiten conocer con precisión la forma, el tamaño y la ubicación de una lesión sospechosa de ser maligna. Llámanos y uno de nuestros agentes te dará más detalles en relación a la cobertura en mamografías de cada póliza.
La contratación de un seguro de salud privado permite ganar tiempo con respecto a las listas de espera en la sanidad pública. De acuerdo al estudio Resa de 2023 impulsado por el Instituto para el Desarrollo e Integración de la Sanidad (IDIS), el tiempo de espera para una mamografía es de aproximadamente 10 días en los seguros de salud privados.
Te ofrecemos a continuación información sobre pólizas de las principales aseguradoras que disponen de cobertura para las mamografías.
Las mamografías se consideran entre los medios de diagnóstico de alta tecnología para los cuales algunas aseguradoras aplican período de carencia (un breve periodo durante el cual no se puede usar un servicio determinado). El período de carencia para las mamografías oscila entre 3 y 6 meses, si bien existen aseguradoras sin período de carencia para mamografías.
Las aseguradoras (AXA, por ejemplo) pueden incluir en sus seguros de salud la mamografía 3D o tomosíntesis, con un coste más elevado que la tradicional mamografía 2D, pero sin embargo, con una perspectiva a largo plazo puede ser más económica porque se hacen menos repeticiones de las imágenes, menos exámenes de seguimiento y menos biopsias. Por eso es muy importante saber que aseguradoras la incluyen, sus costes y límites.